Mi perro tiene tos. ¿Qué hago?

TOS PERRO

Vamos a hablar de una enfermedad extremadamente común a la vuelta de las vacaciones, que es la tos de las perreras.

Se la llama así porque es una enfermedad muy contagiosa, generalmente no muy grave y es francamente frecuente en comunidades caninas abiertas (criaderos con trafico frecuente de animales, residencias, peluquerías caninas, recepciones de clínicas veterinarias, parques, jardines…)

Los canes enfermos tosen y expectoran, dejando los virus en el medio ambiente, de modo que otros perros al olfatear y chupar en estos sitios permiten el ingreso en el sistema respiratorio de estos virus.

En la actualidad el virus que con más frecuencia se asocia a esta infección es el virus de parainfluenza canino. Este ingresa vía oral o inhalatoria, coloniza los epitelios respiratorios y origina síntomas en progresión descendente en el árbol respiratorio. Puede comenzar con descarga acuosa o de moco purulento por la nariz, pasando al poco a dar una tos seca o productiva, según se quede en la traquea o llegue a los bronquios y pulmones. Ocasionalmente se presentan vómitos por el estimulo de la tos, y muchas veces el dueño confunde vómitos y expectoraciones de mucosidad, que puede ser muy abundante, según los casos.

Las lesiones de este cuadro suelen verse agravadas por su colonización por bacterias como la Bordetella Bronchiseptica.

Hay otros virus que producen este cuadro como el virus de moquillo, el adenovirus respiratorio, o mas recientemente descrito el de la gripe canina (esta ultima solo diagnosticada por el momento en los EEUU)

El tratamiento es sintomático a juicio de los facultativos, y el curso es variable, desde unos pocos días a meses, en función de las defensas de cada uno.

Se puede prevenir con vacunas específicas, generalmente fuera del calendario vacunal habitual. El veterinario juzga la utilidad o no de aplicárselo a cada animal. De todos modos son interesantes siempre que se vaya a ir a una residencia canina.